Este 15 de julio del 2018, concluyó el mundial de la FIFA WORLD CUP RUSIA 2018, después de vivir días de mucha emoción, alegrías, decepciones, incertidumbres, llantos y risas, al fin se supo y el mundo obtuvo a su campeón, Francia.

Detrás de todo el escenario futbolístico, entre goles, autogoles, declaraciones, bloopers, pronósticos deportivos, festejos y tantas sorpresas, definitivamente el trabajo de equipo es el que predominó, las selecciones que se destacaron, justamente fueron aquellas que armaron una buena estrategia de juego en equipo, ¿quién diría que Alemania se fuera mucho antes de lo que todos pensábamos?, o que los favoritos como Argentina, Brasil, España, y México no lleguen ni a las semifinales; una vez más América se quedó sin copa.

En el partido de Colombia y Croacia, realmente se vio que no bastó tener el dominio del balón, sino, atacar con más fuerza al oponente, Colombia dio mucho y debemos reconocer que debía y merecía ganar ese partido, más no pudo. Al igual que este partido, se vieron otros muy similares, donde el que equipo que tenía el dominio del balón, no era el que ganaba el partido, ¿qué faltó? Quizá precisión, ataque y fuerza, estas estrategias deben de ser reformuladas para de aquí a 4 años, realmente este mundial nos dejó muy sorprendidos.

Y bien, en la final, realmente mi apoyo era contundente para la selección de Croacia, por su precisión con el balón, sus estrategias de juego, las sorprendentes entregas en la cancha y por supuesto, en su historial mundialero, no tienen ninguna copa. Nadie puede negar que la final estuvo deleitante, ambos equipos dieron un espectáculo digno de aplaudir, quizá este mundial, faltó lo que otros mundiales tenían, más emoción en los juegos, más adrenalina, sin embargo, todos lo disfrutamos y esperamos con muchas ansias el siguiente mundial.